Investigadores de la Universidad de Verona (Italia) han identificado un compuesto presente en el café expreso que podría ayudar a combatir la enfermedad del Alzheimer, según se detalla en un estudio publicado recientemente por la revista Journal of Agricultural and Food Chemistry.
Si bien aún no está claro cómo ni cuándo se desarrolla el Alzheimer, los científicos han descubierto en el pasado que las personas que padecen la enfermedad poseen una concentración excesiva en el cerebro de la proteína tau.
Mayor cafeína, menor concentración de proteína tau
Tras un análisis de composición química en un laboratorio, los investigadores de la nueva publicación detectaron que, a medida que aumentaba la cantidad de cafeína, la acumulación de la proteína tau era menor.
“Hemos presentado un gran número de pruebas de que el café expreso, una bebida muy consumida, es una fuente de compuestos naturales que muestran propiedades beneficiosas para mejorar las patologías relacionadas con tau”, afirmaron los investigadores.
Propiedades preventivas
Asimismo, los investigadores observaron que las proteínas tau no dañaban a las células cuando estuvieron en contacto con la cafeína de un café concentrado, y sugieren que incluso podría ayudar a prevenir nuevas acumulaciones de estas proteínas.
“Se comprobó que las fibrillas acortadas no eran tóxicas para las células y no actuaban como ‘semillas’ para una mayor agrupación”, agregaron.
La lucha contra el Alzheimer
El consumo del café ha sido vinculado en varias investigaciones previas con beneficios para la salud, como poseer propiedades antiinflamatorias o reducir el riesgo de enfermedades como el cáncer o la diabetes.
A pesar de que los científicos aseguran que todavía falta mucha investigación al respecto, ellos consideran que estos hallazgos podrían conducir a tratamientos preventivos o terapéuticos contra el Alzheimer y otras enfermedades similares.
El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa irreversible que destruye lentamente la memoria y la habilidad para realizar tareas. Recientemente, Estados Unidos aprobó el primer medicamento para tratar el Alzheimer.